La aparición de fuertes relaciones de amistad es una de las características más importantes de la adolescencia. ¿Sábes por qué?
Con el comienzo de la adolescencia, muchos chicos y chicas empiezan a preferir pasar más tiempo con sus amigos que con su familia. Puede que tus padres se vean preocupados o se sientas tristes sobre este aspecto, pero es algo normal de esta edad y por lo que todos hemos pasado.
¿Que obtienes de tu grupo de amigos?
Identidad propia. El inicio de la pubertad con el que comienza la adolescencia es también el momento en el que empiezas a buscar tu propia identidad. Ya no sos niños pero aún no sos adulto. Tu familia que hasta hace nada era todo tu mundo ahora se queda pequeña, necesitas salir al exterior, establecer nuevos contactos, crear redes de amigos, descubrir el mundo y tu lugar en él. Y para eso es fundamental el grupo de amigos.
Pares. Sueles construir tu grupo de amigos con chicos y chicas parecidos a tí. Con las mismas aficiones, el mismo gusto por cierta ropa, iguales intereses, y demás. Con amigos semejantes a ti te encuentras cómoda y con ellos estableces tus relaciones de confianza y lealtad. Con ellos puedes hablar de todo lo que te sucede porque a ellos les están ocurriendo las mismas cosas.
Aceptación. Pero además, en medio de los cambios que experimentas no es importante solo saber que también a los otros les ocurren las mismas cosas, es fundamental ser aceptado como eres. Y eso también lo proporciona tu grupo de amigos.
Independencia. Con frecuencia, algunos padres se quejan de que sus hijos se limitan a seguir a sus amigos y son iguales a ellos en todo. En realidad lo que sucede es que dentro del grupo comienzas a crear tu identidad propia y encaminándote al mundo de los adultos.
